Mariposas de madera: El homenaje al rock argentino fundacional

Diseño de logo: Freddy Berro.

Un maratónico concierto de más de 7 horas se realizó el sábado 5 de octubre en el teatro Gran Rex, con la participación de figuras emblemáticas de nuestro rock.

Fuente original: https://comunicarcaba.com/mariposas-de-madera-el-homenaje-al-rock-argentino-fundacional/

Hace algunos años mi querido amigo y maestro, Miguel Grinberg me hizo un comentario, en ocasión de una de las tantas visitas que hice a su programa radial “Rock que me hiciste bien” que se emite por la AM de Radio Nacional: “Tengo la idea de volver a hacer un festival con todos los músicos pioneros del Rock Argentino y entregarles un reconocimiento para homenajearlos por la ardua labor de haber creado este movimiento en nuestro país. Se va a llamar ‘Mariposas de Madera’ como la canción de Miguel Abuelo. La idea es que el rock premie al rock”.

No fue arbitrario el nombre del galardón. Es que la mencionada canción comienza con un verso que dice: “Mariposas de madera yo te voy a regalar(…)”

Pasaron los años y recién en 2018 se pudo concretar ese sueño de Miguel, con un concierto multitudinario y a sala llena en el Teatro Gran Rivadavia.
Debido a la gran cantidad de artistas se decidió homenajear a los músicos comprendidos entre 1965 y 1975.
Fue un concierto memorable, lleno de emoción y nostalgia y que tuvo ¡una duración de más de 5 horas!

Dado el éxito del encuentro, surgió la idea de volver a hacerlo al año siguiente con los artistas que fueron preponderantes en el período 1976-1983.

Y tal cual lo planificado, el pasado sábado 5 de octubre se realizó en el Teatro Gran Rex el esperado concierto de homenaje al período 1976-1983.

La idas y venidas en la aceptación a participar de algunos músicos, desvirtuó un poco la idea, pero no mermó en la expectativa, dado que los afiches que se distribuyeron por la ciudad y por la redes sociales anunciaban una lista muy importante de artistas entre los que se destacaban León Gieco, Víctor Heredia, Litto Nebbia, José Luis Fernández, Ricardo Soulé, Patricia Sosa, Ara Tokatlían, Piero, María Rosa Yorio, Claudia Puyó, Héctor Starc, Kubero Díaz y Miguel Zavaleta, entre más de 70 artistas convocados.

Pese a esto, no se llegaron a vender todas las localidades del teatro (3300) pero se podía apreciar una platea bastante llena y una súper pulman a medio llenar.

Abrió el concierto Norma Peralta, hermana de Miguel Abuelo –acompañada en guitarra por el guitarrista Fernando Rovetta (de Clavos sin cabeza)– cantando 2 canciones de su hermano: “Oye niño” y “El muelle”.

Lo siguió un momento muy emotivo con Gato Azul –hijo de Miguel Abuelo– con la canción que da nombre al concierto cantándola a dúo con un video de su padre fallecido.

Luego vino el homenaje a La Máquina De Hacer Pájaros a cargo de José Luis Fernández con su banda integrada por Roxy del grupo Nexus en voz, Guido Spina en teclados y voz, Juanito Moro en batería, Hernán Cassibba en bajo y Demitan Sielecki en sintetizadores.
Tocaron Obertura 777, un medley  con Rock/Hipercandombe/Ruta perdedora, cerrando con un tema suyo “Mi nuevo Cadillac”.
José Luis Fernandez recibió, tras cartón, su merecido premio Mariposas de Madera.

Para hacer la apertura oficial del concierto subió al escenario el mentor de esta idea, el periodista, escritor y ecologista Miguel Grinberg. «En 1973, el Rock Argentino, alcanzó fama internacional, pero desde 1976 a 1983 debió convivir con gobiernos militares. No es la única expresión popular de la música argentina, pero sí una de las más importantes. Yo les doy gracias al público por asistir y a ellos, los músicos, por venir. Estoy muy emocionado”

La actuación siguiente fue Miguel Zavaleta en teclados con la banda del evento. Tocó “Sin porteros”, “Amanece en la ruta” y finalizó con “Extraño ser”. Fue uno de los picos altos del concierto y él también recibió su premio Mariposas de Madera.

Un muy aplaudido Ara Tokatlian, integrante del legendario grupo Arco Iris nos entregó una muy linda versión de “Blues de Dana” acompañado por la banda estable del concierto

Le siguieron Miguel Krochik, uno de los solistas que tocó en el Acusticazo, con Sergio Polizzi, violinista de las bandas “Bubu” y “Soluna” en dos cálidas versiones de “Adalberto rey de la selva” y “Guilmar”.

A continuación fue el turno de una nueva banda formada por Miguel Schiaffino, Luciano D’Andrea y Esteban Rodriguez. Ellos ganaron el concurso Pre Mariposas de Madera y como premio obtuvieron con la posibilidad de tocar su música en el escenario del festival.

A la banda estable del concierto –Guido Spina en teclados, Abel Pérez en guitarra acústica, Nacho Criscuolo en bajo, Germán Suane en guitarra eléctrica y en la batería Florencia Barrientos– se le sumó un octeto de cuerdas dirigido por Julián Hermida, para acompañar a Daniela Herrero con “Cinema verité” y “Dos murciélagos” de Charly García y Luis Alberto Spinetta, respectivamente.

La misma formación musical acompaño también a María Rosa Yorio en “Maribel” de Spinetta  y en 2 temas de Sui Generis: “Entra” y “En las arenas del circo” (de Alejandro Correa) más conocida como “Gaby” que la artista también supo grabar en hermosas versiones dentro de su discografía.

A esta altura, el festival se iba poniendo muy caliente, en el sentido en que a pesar ya del tiempo transcurrido, nadie se levantaba de su asiento. Es que nadie se quería perder ni un minuto de música de los tremendos artistas que iban desfilando.

Foto (PH): Freddy Berro.

Una tremenda ovación se escuchó cuando ingresó León Gieco.
“Yo recibí el premio ¨Mariposa de Madera¨ el año pasado, en el Gran Rivadavia. Por eso ahora, quiero entregárselo a uno de los máximos artistas de nuestro país. Uno de los mejores compositores y cantores, incluso Mercedes Sosa, le grabó más de 25 canciones, con ustedes: ¡Víctor Heredia!”
Otra ovación recibió a Víctor, que no siendo del palo del rock, la gente lo reconoce por su compromiso y constancia en la composición de sus canciones.
Juntos hicieron “La colina de la vida” y “Sobreviviendo”, ¡con la gente de pie aplaudiéndolos!

Y también fue muy ovacionado Piero, que junto a su hijo Juan hicieron una sola canción: “Para el pueblo lo que es del pueblo”. Fue una lástima que se confundiera la letra y lamentablemente no estuvo su actuación a la altura de las expectativas.

“Amor de primavera” de Tanguito fue interpretada por la hermosa voz de Majo Castro y enseguida fue el turno de mis amigos Aníbal Forcada y Willie Campins, integrantes del trío Oveja Negra.
Hicieron una muy linda versión de “Vieja lluvia”, recordaron a Oski Amante, el tercer integrante, fallecido e invitaron a una de las mejores voces femeninas de nuestro rock: Claudia Puyó a cantar el “Blues de los plomos” y al finalizar, Claudia recibió su premio Mariposas de Madera, también.

Y ahora le tocó el turno a Nexus, banda de rock sinfónico que homenajeó al grupo Crucis, haciendo el tema “Todo tiempo posible” y dedicándosela a Ada Moreno, fotógrafa de muchas fotos que se ven en diversos discos del rock argentino. Justamente por esto es que ella recibió su premio, agradeciéndole a Miguel Grinberg “por haberme hecho conocer la palabra ecología hace 40 años” y recordó a Jorge Álvarez, alma mater de este movimiento, “sin él esto hubiese sido muchísimo más difícil”

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Con violín en mano hizo su entrada Ricardo Soulé, líder de la banda Vox Dei, que con su banda actual nos deleitaron con “Libros Sapienciales” y luego con “Génesis”, temas del disco La Biblia y del cual él es uno de los autores.
Escuchar al público cantar pone la piel de gallina… y la ovación que recibió al dejar el escenario, también.

Con banda propia, fue el turno de Héctor Starc, también muy ovacionado por el público. Tocó 3 temas de neto corte blusero y donde se lució en sendos solos de guitarra.
Y nos dio una sorpresa: el anuncio de la reunión de Tantor para el 8 de noviembre.

Volvió Claudia Puyó al escenario para hacer un tema de su primer disco Del Oeste: “Aquellos tiempos modernos”, acompañada por su guitarra y Ricardo Maril en piano.
Al finalizar, ella, Gady Pampillón y Juanito Moro recibieron sus premios

Y vino una de las mejores performances de la noche. Los músicos de Memphis, La Blusera se apoderaron del Gran Rex con 2 temas potentes que hicieron levantar al público: “Moscato, pizza y fainá” y “El blues de las 6 y 30”.
¡Sonaron de maravilla!

Y llegó el turno de La Pesada del Blues. Claudia Puyó y Eduardo Frezza en voz, Gady Pampillón y Osvaldo Zavala en guitarras, Daniel Sueldo en bajo y Daniel Tomaselli en batería sencillamente la rompieron ¡sobre el escenario!
Los duelos de guitarra entre Pampillón y Zavala fueron una clase de rock and roll y ¡levantaron de sus asientos al público del Gran Rex!

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Homenajeando a Miguel Cantilo y Punch, una formación con Isa Portugheis en batería, Kubero Díaz en guitarra, Daniel Saralegui en bajo junto a Guido Spina en piano y Abel Pérez en guitarra acústica hicieron una muy linda versión de “Adonde quiera que voy” cantada por la magistral voz de Claudia Puyó.

Bocón Frascino, el legendario bajista de Pescado Rabioso, hizo un tema de este grupo: “El monstruo de la laguna” con su grupo Engranaje.

Y llegó el momento de recordar a todos los músicos que ya no están entre nosotros.
Mientras se iban sucediendo, en la pantalla, las fotos de todos ellos, Brenda Gitman acompañada por Aníbal Forcada en guitarra, cantaba “Canción para los días de la vida” de Luis Alberto Spinetta.
Quien escribe, además de emocionarse, se asombró de la gran cantidad que son.

Foto (PH): Freddy Berro.

El rock pesado tuvo su momento con Olaf Mangialavore homenajeando a la banda ¨Lulu¨ con su banda actual El Dragón y al finalizar hizo su entrada Orion’s.
Los hermanos Bar repitieron los mismos temas que en la edición anterior: “En un cuarto vacío” y “Toda la noche hasta que salga el sol” cuyo estribillo fue cantado por todo el Gran Rex.

Bob Serafine junto a su banda Erosión hicieron 3 temas: dos en inglés y una potente versión de “Por el tren del cielo” donde se destacó la excelente voz de la vocalista.

Y a continuación otro pico máximo en una noche que ya era muy larga. “Solo quiero Rock and roll” de La Torre en la voz magistral de Patricia Sosa levantó de sus butacas a un ya cansado público que la aplaudió a rabiar.
Minutos antes, Patricia también había recibido su premio Mariposas de Madera, destacando en su agradecimiento, lo difícil que era para una mujer liderar una banda de rock and roll por aquella época.
Ella estaba programada para ser el cierre del festival. El atraso en el cronograma hizo que se adelantara su actuación.

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Fue el turno de la Deby Blues. Un solo tema y casi de manera desapercibida.

Iban 7 horas y la gente ya estaba un poco cansada, pero quienes se quedaron pudieron apreciar a una de las bandas que mejor sonaron en esta larga noche: El Reloj.
Impresionante como suenan y la voz de Eduardo Frezza es hoy quizás una de las mejores voces de nuestro rock.
Tocaron dos canciones: “Alguien más en quien confiar” y “Blues del atardecer”.
A la banda le sumó Gady Pampillón como invitado y nuevamente el duelo de guitarras con Osvaldo Zavala ¡fue para alquilar balcones!

Gady se quedó en el escenario y recibió a sus compañeros de la banda Adoquín que no son otros que Rinaldo Rafanelli y Juan Rodríguez, la base de Sui Generis y de Polifemo.
Hicieron dos temas de la banda y terminaron con una potente versión de “Suéltate rock and roll”

El concierto finalizó con dos canciones de Raúl Fernandez y con un telón que se cerró abruptamente.

Uno esperaba un cierre con todos los músicos sobre el escenario, como fue en la edición pasada pero ya habían pasado muchas horas y muchos músicos y público también, se habían retirado.

Una mención muy especial para Miguel Grinberg, por la convocatoria y a Jorge “Monitor” Rodríguez y “Conejo» García. Ambos se pusieron la organización al hombro y podemos decir que fue muy buena.
Es muy difícil amalgamar a tantos artistas, horarios, egos y exigencias. Pero lo lograron con creces.

En síntesis: una muy linda noche de rock argentino
Qué lindo es volver a sentir un concierto como los de aquellas épocas, sin pogos ni público que se crea más protagonista que los artistas que están sobre el escenario.

Si bien fue un tanto largo, este tipo de eventos a uno, que ama esta música argentina, lo terminan de llenar de energía y mantener la pasión.

Fue una fiesta.

PD: Quiero agradecer a la producción el haber puesto el logo que creé para este evento como fondo de escenario durante todo el concierto.

Y vos ¿estuviste ahí? ¿qué opinás?

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